31/10/07

31/10/07

Cuando uno por fin se resigna a aceptar que la vida no es como debería y empieza a aprender a vivir con ello, hace esfuerzos por sonreír y tratar de llevar las cosas lo mejor posible, suceden cosas que te hacen perder nuevamente la esperanza. Y no es sólo perderla, sino la manera en que uno se va dando cuenta vez tras vez de que puedes ser bueno o malo, al final eso no importa… al final nada importa porque se va el bueno y se va el malo, así, sin más.

Alguien me dijo que se lo llevó para que no sufriera… ojalá yo pudiera ser así de optimista.

Hay veces que buscas alivio escribiendo, bebiendo, durmiendo… pero parece que con cada línea, trago o sueño la herida se abre más, más adentro, con más fuerza.

2 Comentarios:

coto dijo...

Chiales, pues que paso o que pedo?

LuizitoGS dijo...

todos tenemos un momento deprimente donde nos paramos a investigar que tanto tenemos, que ganamos y que perdimos, pero todo tiene su valor humano, incluso lo que perdemos. Lo importante es no vivir de los recuerdos, porque te pudren la vida, la conciencia y la memoria.
Un saludito Rosita-Sabrina. :)